
Valentino realizó una nueva prueba en Brno, con una Yamaha SBK, con el objetivo de definir su verdadero estado físico con vista a su participación o no en el GP de Alemania, el próximo fin de semana.
Fueron 46 giros totales, a lo largo de tres horas, siendo su mejor marca 1’59.1 (como referencia, este domingo 11/06, el piloto de SBK Cal Crutchlow con la misma R1 de Yamaha registró el mejor tiempo en carrera con 1’59.291). “Me sentí mucho mejor que la semana pasada (en la prueba de Misano), pero hay dos temas por resolver: cierto dolor en la rodilla luego de andar un poco y falta de fuerza en la espalda. El miércoles la radiografía nos dirá si la tibia se encuentra en forma”, expresó Valentino, a quien se lo observó movilizarse con muletas.
Mientras se aguarda la decisión de Rossi, las versiones de su pase a Ducati para el 2011, toman cada vez más fuerza.
Guido Meda es un periodista italiano, relator (junto a Loris Reggiani) de las transmisiones de televisivas de MotoGP por Mediaset, una cadena de cable italiana. Guido, es palabra autorizada, con información de primera fuente, con llegada directa a Valentino. Meda y Giorgio Terruzzi, otro periodista italiano, han publicado una reconstrucción de un proceso, al que solo le faltaría la comunicación oficial. Conozco a Guido Meda, desde hace ocho años, cuando en el GP de Brasil del 2002, me consultó sobre algunos datos de Sebas Porto. Sobre la base de su seriedad profesional reproduzco algunos conceptos de su publicación.
La relación Valentino-Ducati reconoce algunos desencuentros en el pasado. No llegó a buen puerto aquel ofrecimiento del 2003, cuando Rossi estaba cansado de Honda y tenía que elegir entre la Ducati que le ofertaba “Juntos podemos ser una máquina de guerra” y la Yamaha que lo seducía con un simple “Te necesitamos” pero todo giraba alrededor del italiano. La decisión, en aquel momento, fue por Yamaha, moto y marca con la que obtuvo el título del 2004.
Hay efectos colaterales, como aquellos que percibió Rossi, cuando Casey Stoner alcanzó la corona del 2007 sobre la Ducati, porque observó que los fans italianos repartían su ‘corazón’ entre The Doctor y la ‘Roja’ de Borgo Panigale.
Pero la posibilidad de un ‘matrimonio’ entre los dos comenzó a tomar forma, luego de que se conocieran las primeras versiones sobre la partida de Stoner a Honda, que Livio Suppo (ex Manager de Ducati MotoGP, ahora en Marketing de HRC) habría tejido durante el receso de pre temporada. Ahora, no hubo intermediarios, porque Filippo Preziosi (Director Técnico de Ducati Corse) y la empresa Philip Morris (patrocinante de la Ducati MotoGP), fueron los autores de llevar una propuesta de Valentino, que contempla un contrato de dos años de extensión, donde los 13 millones de euros por temporada, es apenas un dato inicial, porque junto a Ducati y Marlboro estaría Fiat –que no seguiría con Yamaha- y otros patrocinantes, así que la cifra aumentaría considerablemente.
¿Por qué Rossi tomó seriamente este ofrecimiento?
Guido Meda y Giorgio Terruzzi enumeran una serie de razones. Desde la ida (por jubilación) a fin de año de Masao Furusawa, el Nº 1 de competición en Yamaha, aliado incondicional de Valentino, pasando por planteos a Yamaha, que significaban una disyuntiva compleja, porque frente al ambicioso avance de Lorenzo, le exigía a la marca de los diapasones que le otorgara un status especial, en la condición de piloto desarrollador de una moto que, Valentino mediante, ha ganado cuatro campeonatos. Los deseos de Yamaha de mantener a los dos –The Doctor y Lorenzo- fueron un desaire para el italiano.
Cuando ocurrió el accidente de Mugello, Valentino apreció un gesto de Ducati, que fue organizado velozmente del sábado para el domingo: la tribuna ducatista estaba cubierta de camisetas rojas que levantaron pancartas blancas formando las palabras ‘Torna Vale’ (Vuelve Vale) justo cuando pasaba el helicóptero de la televisión. Un mensaje cálido como directo de la hinchada de Ducati al espíritu golpeado de Valentino.
El desafío es grande para Valentino.
Después de haber vencido con la Honda 500 por primera vez en el 2001. Después de haber alcanzado el primer título de MotoGP con la Honda 990 en el 2002 y ratificar en el 2003 con la marca del ala dorada. Después de haberse mudado a Yamaha y ganar el título 2004 en el año de su debut. Así, hasta el 2009, cuando logra de la mano de Yamaha su séptima corona en la categoría reina
En el 2011, con 32 años, Valentino enfrentará dos nuevas retos: desarrollar la nueva Ducati para el reglamento del 2012 y salir campeón con una nueva marca. Respaldado por la experiencia de 16 años (debutó en 125 en el ’96), nueve títulos mundiales y el apoyo integro de su fans: piloto italiano con moto italiana. El apoyo de ‘la tricolor’ a la ‘roja’, una síntesis sublime.
En lo que queda del 2010, según Meda, Valentino estará sometido a diversas urgencias. Volver a correr pronto. Volver a ser ganador sobre la Yamaha. Volver a batir a Lorenzo. Tres o cuatro meses con Yamaha que no van a ser fáciles. Una despedida tensa cuyo desarrollo es todo un interrogante.
El 2011 augura una dupla, pocas veces vista, la de un técnico extraordinario, que ya supo del sabor de vencer a las grandes fábricas, como Filippo Preziosi con su monumental criatura mecánica: la genuina Ducati Desmosedici, junto a uno de los pilotos más brillantes de la historia del motociclismo de competición: Valentino Rossi, el hombre cuya magia hizo crecer la pasión de los amantes de las dos ruedas, a fuerza de electrizantes acciones en pista y festejos de triunfos originales como simpáticos. El Nº 46, un icono de Valentino, recorre el mundo estampado en toda clase de vehículos, una muestra de identificación con un ídolo y deportista, que devuelve todo a su público.
En un más o en un menos, Valentino regresará a las pistas. Cuando este en condiciones lo hará. En breve, según dice la prensa italiana, podría anunciarse el pase de Yamaha a Ducati para el 2011. De una o de muchas maneras, Valentino sigue conservando una porción del centro de la escena, aunque no corra, ni gane o sume puntos.
Mario Diez
distribución en argentina
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